Cervezas de Navidad 2013-2014, o más bien ales de invierno (y 4)

Con esta ya llegamos a la cuarta entrada dedicada a las cervezas de Navidad de la temporada 2013-2014, o a estas alturas debería decir mejor ales de invierno, ya que los turrones quedaron bien atrás. En esta ocasión además, las cervezas comentadas entran más dentro del grupo de ales invernales que cervezas navideñas como tal, ya que se alejan por sus características organolépticas de las clásicas cervezas de Navidad, a pesar de que exista alguna tímida vinculación con la fiestas navideñas, aunque sea sólo por el nombre.



Brewdog Santa Paws y Brewdog Hoppy Christmas

Qué se puede decir de Brewdog? Una de las ¿microfábricas? que mayor presencia internacional tienen en la actualidad, y que mayor desarrollo ha experimentado en su corta trayectoria, ya que no olvidemos que fue fundada en 2006, hace tan sólo 7 años. Sin duda que sus fundadores, los escoceses James Watt y Martin Dickie no se esperaban el tremendo éxito que está viviendo su compañía, cuando comenzaron con el objetivo de poder consumir una cerveza elaborada por ellos mismos, alejada de las cervezas industriales que copaban el mercado. Hace poco más de 1 año, tuvieron que mudarse, debido a la necesidad de ampliación de la producción, trasladando la original planta de producción de Fraserburg a una mucho mayor en Ellon. Hoy en día, es la más importante cervecera de Escocia, y una de las más relevantes del Reino Unido, llegando a fabricar 2,5 millones de litros al año.
Su éxito, se ha apoyado sobre varios pilares: un producto de calidad, una buena política de marketing y de crecimiento, y una imagen transgresora que ha logrado conectar con un publico objetivo (o target, como se estila decir hoy en día), ávido por encontrar una marca de cerveza capaz de ofrecer algo diferente.
En cuanto a su imagen de marca, muy trabajada, han tenido especial protagonismo los nombres elegidos para cada una de sus referencias, caracterizados por ser irreverentes, desvergonzados, siempre jugando con sentido del humor, muchas veces salpicado de un toque gamberro.
Así tenemos algunos nombres de cervezas como Punk, Hardcore, Tactical Nuclear Penguin, Hello, my Name is Ingrid, Trashy Blonde, Dead Pony Club y otras muchas. En el caso de las dos cervezas "navideñas" comentadas en la entrada no es menos. Tenemos a la Santa Paws, que hace un juego de palabras entre Santa Claus, y la palabra Paws, que quiere decir "zarpas" o "manazas". Una particular scotch ale mucho menos alcohólica y dulce, y sí más cafetosa de lo que se espera del estilo. Y la segunda cerveza comentada tiene por nombre, Hoppy Christmas, estableciendo esta vez el juego de palabras entre la expresión universalmente conocida de "Happy Christmas" usada por los anglosajones para felicitar las Pascuas, y la palabra Hoppy, que hace referencia a su majestad el lúpulo, el ingrediente que vuelve locos a muchos de los cerveceros en la actualidad. Una IPA, que de navideña tiene básicamente el nombre, ya que nos encontramos realmente ante una buena ejecución de una IPA single hop con Simcoe, por parte de los escoceses, aunque sin llegar a las cotas alcanzada por otra IPA de la marca, la Jack the Hammer, para mi gusto la mejor que han fabricado hasta la fecha.


Graduación: 4,5º
Temperatura de servicio: 8ºC aprox.
Tipo de vaso recomendado: Vaso de pinta inglés o americano.

Color: Marrón oscuro con brillos caoba al trasluz. Escasa burbuja y delgada corona de espuma de color beige, muy porosa y mediana retención, que deja algunos rastros en los primeros tragos.
Aroma: Grano tostado y café por encima de notas más suaves de hierbas campestres, casi medicinales y más sutiles aún de miel, sólo perceptibles muy en el fondo. 
Sabor: De cuerpo medio-ligero y con un carbónico liviano, es una cerveza de perfil más amargo que dulce, donde destaca el sabor a grano de café tostado, y hierbas combinado con algunos matices especiados. La miel que se supone que contiene la cerveza no logra hacer acto de presencia con la fuerza esperada. El final es seco y astringente.

Maridaje: Costillar de cerdo con salsa de miel.

Nota:  

Graduación: 7,2º
Temperatura de servicio: 8ºC aprox.
Tipo de vaso recomendado: Vaso de pinta inglés o americano.

Color: De tono más dorado que ambarino y con buena transparencia, carbonatación visible y una corona de espuma no muy amplia, de color blanco, textura esponjosa, pero retención destacable consiguiendo mantenerse casi hasta el final, y dejando algunos rastros de encaje.
Aroma: Intenso, claramente dominado por el lúpulo que se pone de manifiesto  por las notas frutales que aparecen donde destaca la piña y los cítricos. Acompañan también notas maltosas a caramelo y pan que logran poner el contrapunto.
Sabor: Cerveza de cuerpo medio, carbonatación ajustada, y delicado sabor muy bien balanceado. Gusto frutal sobre el que se extienda un suave amargor, muy bien compensado con matices de caramelo. Final moderadamente amargo con un poco de presencia de alcohol, que no llega a molestar.

Maridaje: Confit de pato.

Nota: 

Anderson Valley Winter Solstice Seasonal Ale

La cervecera norteamericana Anderson Valley, de la que ya hablé allá por 2012, deja entrever su compromiso con el medio ambiente, nada más contemplar sus etiquetas donde aparece un omnipresente oso-alce bebiendo de un lago, en medio de una estampa idílica de singular belleza natural. La misma que podríamos encontrar en el valle del mismo nombre ubicado a unos 160 kilómetros de San Francisco, al norte del estado California. Fundada en 1987 por Kenneth Allen en la ciudad de Boonville, se trata de una compañía con unos inicios humildes en los sótanos de la cervecería The Saloon Buckhorn, pero que actualmente fabrica nada menos que 36.000 barriles de cerveza al año y más de una decena de referencias, donde destacan la Boont Amber Ale, la Barney Flats Oatmeal Stout, o la Hop Ottin IPA, entre otras, siendo esta última durante mucho tiempo mi IPA favorita del mercado. Hoy en día la compañía ya no pertenece a Kenneth tras retirarse en 2010 y vender la compañía al veterano de la industria Trey White, pero continúa política de sostenibilidad y respeto al medio ambiente.
Desde 2006, el 40% de las necesidades eléctricas de la planta de producción son cubiertas con un generador fotovoltaico de paneles solares. Además mantienen una política de reciclaje exhaustiva que afecta al papel, acero, vidrio, cartón y botellas de plástico que utiliza la factoría. Incluso las botellas que usan están compuestas por entre un 50% y un 65% de material reciclado. No sorprende por tanto que la Anderson Valley Brewing haya sido galardonada con el premio WRAP (Premio al mejor programa de prevención de residuos de California) durante 5 años consecutivos desde 2000 a 2005.
La cerveza que nos ocupa hoy es una de sus ales de temporada, concretamente la invernal, con un nombre que lo dice todo: Winter Solstice Seasonal Ale, haciendo referencia a un elemento natural del invierno, el solsticio que marca su comienzo, en lugar de usar como inspiración la Navidad y todo lo que la rodea.




Graduación: 6,9º
Temperatura de servicio: 8ºC-10ºC
Tipo de vaso recomendado: Vaso de pinta americano.

Color: De color anaranjado oscuro, similar a un ámbar intenso, exhibe una corona de espuma de un centímetro de espesor, color amarillento, y que mantiene una retención discreta, dejando tímidos restos adheridos a la copa
Aroma: Rico en matices y dominado por la malta con notas dulzonas y afrutadas. Sobresale el caramelo, toffee, y también confitura de melocotón, notas de naranja, manzana, herbáceas y especiadas, donde podemos encontrar canela, nuez moscada y algún punto de vainilla.
Sabor: Cerveza de cuerpo medio y carbonatación liviana, entra con facilidad, y mantiene un sabor agradable y al mismo tiempo complejo, rico en matices que van desde el toffee y el caramelo, a los sabores afrutados confitados, y siempre acompañados por especias dulces como la canela. El final es seco, y un punto agridulce, con una leve presencia de alcohol. 

Maridaje: Asado de pavo.

Nota: 



Comentarios

  1. De las Brewdog no esperaba gran cosa como ya he dicho otras veces debido a varios chascos previos, pero tanto la Santa Paws, muy curiosa (creo que soy el único al que le ha entusiasmado por lo que he leído por ahí), como la Hoppy Christmas, muy bebible y lupulada sin el toque "ajarabeado" que le encuentro a varias BrewDog lupuladas. La Anderson es uno de esos ejemplos yanquies con excelente relación calidad-precio. En mi opinión, tres grandes cervezas, y aunque buena de navideña la Hoppy Christmas tiene más bien poco... ;).

    Un abrazo!

    P.D: ¿Llegaste a animarte con alguno de esos maridajes o solo lo haces para conseguir que babeemos? ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Con Brewdog me está sucediendo algo muy similar a lo que me sucede con Mikkeller, por ejemplo, aunque la línea de producción de los escoceses sea más homogénea en cuanto a calidad. Cierto es que fiascos haylos dentro del portfolio de Brewdog, como en el de Mikkeller, y también muy gratas sorpresas. Mientras que por un lado la Hoppy Christmas me pareció una IPA muy acertada (aunque de navideña sólo tenga el nombre, como bien dices), la Santa Paws no llegó a llenarme tanto ni mucho menos. Quizás me sorprendió, porque me esperaba una scotch ale más al uso, con un toque especiado "navideño". La Dogma que por ejemplo tiene Brewdog dentro de ese estilo, resulta mucho más de mi agrado. En cuanto a los maridajes, a veces son propuestos y otras veces los he podido comprobar de primera mano. Como es obvio, si todas las cervezas que comento las consumiera comiendo los platos que propongo, la báscula me terminaría gritando ;), por lo que muchas de ellas las tomo solas. Supongo que como le sucede a la mayoría de nosotros. Un abrazo!

      Eliminar
  2. Me fascina lo frecuentemente que coincidimos en las valoraciones. Tengo pendiente de publicar Santa Paws, y he sacado más o menos las mismos matices, y le he dado la misma nota. ¿También te ha parecido que se ajusta más bien poco a su estilo?

    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mi me sucede lo mismo. Soy seguidor de tu blog desde hace mucho tiempo. Es una de mis lecturas fijas, y veo que en muchas de las cervezas en las que coincidimos, tenemos apreciaciones afines. La Santa Paws, como comentas, no se ajusta mucho a su estilo, a mi parecer, o al menos en el que han querido meterla. No me pareció "mala" cerveza, pero se alejó de lo que esperaba. Las scotch ale/"wee heavy" me gustan bastante, y esta Santa Paws no se acerca. Su bajo contenido alcohólico me tuvo que hacer sospechar algo de antemano ;)
      Salu2!

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares